Alex Kidd in Miracle World
Autor: ORD, 1-1-2003

¿Tenía mascota Sega antes de que Yuji Naka se sacara de la manga a Sonic? Por supuesto que sí, se trataba del entrañable y orejudo Alex Kidd, protagonista del que sin lugar a dudas es el título más jugado de la historia de Master System.

Plataforma: Master System Tipo de juego: Plataformas Desarrollador: Sega Editor/Distribuidor: Sega Nº de jugadores: 1 Versión: PAL Año: 1986 Disponibilidad: Rom

Alex Kidd, príncipe de la ciudad de Radaxian, ha estado viviendo durante los últimos siete años apartado en la montaña Eterna, estudiando un antiguo arte llamado Shellcore que le permite canalizar su energía interna hasta el punto de romper piedras con sus propias manos. Cuando abandona su retiro, y de camino a la que había sido su morada, se encuentra con un habitante de Radaxian que emplea su último aliento de vida en decirle que la ciudad esta en grave peligro y en darle un mapa y la Piedra del Sol. Más tarde, averigua que un malhechor llamado Janken el Grande ha ocupado por la fuerza el trono de Radaxian y secuestrado a su hermano gemelo Egle. Alex, como legítimo heredero de la corona, no puede más que emplear las habilidades adquiridas durante su estancia en la montaña Eterna para dar su merecido al usurpador y liberar a su familia y a su pueblo.

En 1986, juegos como Alex Kidd in Miracle World marcaban la superioridad técnica de Master System con respecto a los otras plataformas existentes en el mercado. No se habían visto hasta entonces sprites y entornos tan coloridos, ni escenarios con tanto detalle. Comparándolo ya con la totalidad del catálogo de MS, es imposible que no se deje sentir el paso del tiempo al confrontarlo con los juegos punteros de los 90, los personajes son bastante pequeños y las animaciones de los enemigos sólo están compuestas por dos cuadros, el diseño de estos últimos es bastante curioso, rayando en lo humorístico (llamas y piedras con ojos y nariz, peces de mandíbula prominente, pulpos de un único tentáculo...) siendo casi todos ellos seres de la fauna de Radaxian. Los escenarios hacen un uso no muy adecuado de la perspectiva forzada, dando en muchos momentos la sensación de que nuestro orejudo amigo camina entre edificaciones de juguete y bonsáis.

La banda sonora de ésta, la primera aventura de Alex Kidd, posiblemente sea una de las que más fácilmente recuerden los usuarios que tuvieron la 8 bits de Sega, lo que ya nos indica que no era precisamente mala; mención especial para los acordes introductorios, famosos en el "mundo mundial". Los efectos de sonido son sorprendentemente variados, no hay evento de mínima importancia que no vaya acompañado de uno propio e individualizado.

Posiblemente encajar a este juego en el género de las plataformas, no sea del todo justo, ya que la variedad de las acciones a desempeñar y opciones para escoger eran apabullantes en su época, y casi que lo acercaban a una aventura del corte de los Wonder Boy. Esta comparación no es tan exagerada como podría parecer a primera vista, la importancia del dinero y de los elementos que se adquieren en las tiendas, algunos facilitan en extremo el paso por algunas fases, es prueba fehaciente de ello. El vil metal no dará la felicidad, pero en AKinMW está claro que ayuda bastante, bastones que permiten levitar, helicópteros, motos, anillos que lanzan olas de fuego, brazaletes de inmunidad... de todo se puede hallar en las tiendas ubicadas al principio de algunas fases, si es la primera vez que se juega el principal obstáculo será dar con ítem más adecuado para cada nivel. Algunas fases rompen con la línea habitual del juego, y ya nos ponen de salida conduciendo algún vehículo como un helicóptero o una lancha o bien nos hacen darnos algún chapuzón que otro, variando así la física y el control del personaje, lo que está muy bien para mantener el interés del jugador despierto. Algo que caracteriza sobremanera a este juego es la peculiar forma de librarnos de buena parte de los enemigos finales, nada más y nada menos que mediante el popular "piedra, papel, tijera" esto podría indicar que el azar decidiría los enfrentamientos, pero en cuanto consigamos la bola que lee el pensamiento la cosa se convierte en una cuestión de reflejos más que de otra cosa.

A nivel personal Alex Kidd in Miracle World me parece un juego de referencia, no sólo en la vida de Master System, sino en la historia de Sega, que por desgracia ha caído en un injusto olvido tanto entre los aficionados como dentro de la propia compañía, más de una década hace ya que no tenemos la compañía del príncipe de Radaxian, viviendo una nueva peripecia en nuestras pantallas. ¿Será rescatado de su ostracismo para Game Boy Advance?.

TÉCNICA 7 GRÁFICOS 7 SONIDO 7 JUGABILIDAD 8 DIVERSIÓN 9 DURACIÓN 7 TOTAL MUY BUENO Media de los lectores: 9.6 Puntuar el juego Otros análisis: No hay más análisis Sobre las puntuaciones Lo mejor: Una aventura sorprendentemente variada para la época. Lo peor: El mal uso de la perspectiva forzada.