F-Zero GX
Autor:
SamSolo,
18-9-2004
La histórica primera colaboración entre dos rivales irreconciliables durante una década, Sega y Nintendo, no pudo resultar más provechosa para la saga F-Zero que recuperó el prestigio de tiempos pretéritos.
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Plataforma:
Game Cube
Tipo
de juego: Conducción
Desarrollador:
Amusement Vision
Editor/Distribuidor:
Nintendo |
Nº
de jugadores: 1 - 4
Versión:
PAL
Año:
2003
Disponibilidad:
A la venta en España |
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Resulta curioso cuando menos el ver los logos de Sega y Nintendo apareciendo juntos en la pantalla. Los antaño competidores acérrimos unen ahora sus fuerzas tras haber sido desplazados del liderato del mercado de los videojuegos. Este F-Zero GX, junto con su versión de recreativa F-Zero AX, es el ejemplo claro de aquello de que quien tuvo retuvo, pues estamos ante uno de los mejores juegos de carreras futuristas del mercado.
El Juego
La franquicia F-Zero es de sobra conocida por los habituales a las máquinas de la gran N; desde aquel primer juego con su glorioso modo-7 hasta esta última versión, F-Zero siempre ha sido sinónimo de velocidades de vértigo y jugabilidad rabiosa. Esta vez el desarrollo ha corrido a cargo del grupo AV en estrecha colaboración con los creativos de Nintendo, y hemos de decir que el resultado muestra a las claras el porqué los desarrolladores japoneses se cuentan entre los mejores del planeta.
La mecánica del juego es la tradicional, correr entre un nutrido grupo de participantes intentando llegar el primero a la meta, haciendo buen uso de nuestro turbo, los aceleradores esparcidos por el trazado y procurando dañar, cuando no eliminar, a los contrarios con nuestras embestidas.
Esto que suena tan sencillo se vuelve endiabladamente complejo, y sobre todo, adictivo merced a la increíble velocidad que alcanza el juego unido a un cuidado diseño global, en especial de los circuitos. Pasmado me he quedado con la sensación de vértigo que es capaz de producir este programa.
Afortunadamente los controles han sido ajustados al milímetro, respondiendo al instante a nuestras órdenes. La distribución de estos es la tradicional, dos botones, A y B para acelerar y frenar, los gatillos para hacer los desplazamientos laterales, con la Y accedemos al turbo y el inefable Z para las embestidas. El turbo está estratégicamente situado para poder pulsarlo mientras mantenemos al acelerador, pero ese botón Z para los ataques giratorios se hace algo engorroso de usar en los primeros instantes, pero con un poco de práctica todo va como la seda. Además dispondremos de algunas combinaciones de botones y sticks que nos permitirán realizar movimientos más complejos.
El turbo consumirá parte de nuestra barra de energía, la cual podrá ser recuperada en diversas secciones de la pista, casi siempre en lugares de acceso sencillo y cercanos a la meta. Si la citada barra se agota, nuestra nave quedará destruida. Así pues deberemos administrar esta energía con sabiduría para no quedarnos sin ella en ese momento que tanto la necesitaremos. Eso si el turbo sólo a partir de la segunda vuelta. Así mismo al comienzo de cada carrera podremos ajustar la relación aceleración/velocidad punta de nuestra nave, parámetro fundamental para según que pista acometamos.
Otro de los aspectos destacados de este F-Zero es su generosa cantidad de modos de juego, entre los cuales destaca con luz propia el modo historia y el customize. En el primero se han creado hilos argumentales con sus secuencias de vídeo pertinentes para los diversos personajes del juego, de gran calidad todo sea dicho. En el segundo podremos crear desde cero nuestra nave, editándola y configurándola a nuestro antojo, así como acceder a un completo editor y a la tienda. Además de estas dos perlas dispondremos los modos de juego habituales en este ramo, pudiendo correr hasta cuatro jugadores en pantalla dividida.
Como motor del desarrollo del juego se ha creado un sistema de créditos que iremos obteniendo a base de jugar en los diversos modos. Con estos créditos iremos a la tienda en donde podremos comprar casi de todo, desde nuevos personajes jugables hasta nuevos niveles del modo historia pasando por las consabidas piezas con las que trastear en nuestro garaje.
Tras esta vista de pájaro sobre el juego y su mecánica no quisiera pasar al aspecto técnico sin destacar el excelente trabajo realizado en el diseño de las pistas. En principio parecen sencillas y con escasos recursos jugables, pero tras media hora jugando se abrirá la caja de las sorpresas; cada giro, cada tramo en zigzag, cada acelerador y cada rampa está colocada con una planificación e inteligencia evidente, haciendo que en este F-Zero la trazada sea más importante que nunca, es un auténtico placer recorrer las pistas en modo cronometrado únicamente para poder estudiar su trazado y ver que configuración nos es más ventajosa en nuestra nave. Fantástico.
La tecnología
Bueno llegamos al aspecto que parece mover actualmente el mercado del videojuego. F-Zero es, como decirlo, una delicia visual. Con modelos poligonales francamente acertados, texturizados de gran calidad, transparencias geniales y efectos de lo más variado, diríamos que es un juego de gama alta, pero cuando ves la velocidad a la que se mueve el conjunto es cuando pasas a quitarte el sombrero. Un refresco de pantalla a sesenta cuadros por segundo sin ninguna, y digo ninguna, ralentización. Impresionante. Como únicas carencias podríamos señalar el poco trabajo que se ha realizado en las explosiones de las naves, algo bruscas en sus transiciones. Además notaremos un ligero efecto niebla en los fondos, que da la impresión de ser realizado por el propio programa; supongo que se ha implementado debido a la altísima velocidad a la que se deben mostrar los elementos del escenario (por la velocidad del juego), lo cual está directamente relacionado con los accesos a memoria y disco del sistema, que obviamente presentan unas ciertas limitaciones.
El apartado sonoro no se queda atrás, con soporte para Dolby Pro Logic II las carreras ganan en profundidad espacial, en especial con los espectaculares sonidos de los motores de las diferentes naves. El resto de efectos cumple a la perfección con su cometido. Por el contrario las melodías han quedado algo descuidadas, sin desentonar pero tampoco resaltan en medida alguna, salvando el remake del tema tradicional de la franquicia que resulta especialmente refrescante.
Además este F-Zero GX es interconectable con la versión arcade, F-Zero AX, en la cual podrás insertar tu tarjeta de memoria y utilizar tu propia nave o compartir los récords entre ellas, un detalle agradable para los aficionados a los salones recreativos.
Opinión final
Para ser sincero la franquicia F-Zero nunca ha sido de mis preferidas, con lo que cuando este cayó en mis manos era ciertamente escéptico. Por fortuna mis escasas expectativas fueron ampliamente superadas por un sistema de juego ágil y sencillo, con un control y jugabilidad a prueba de bombas, especialmente con el excelente diseño de pistas, y para bordarlo con un apartado técnico sobresaliente. Si a todo esto le sumamos un gran nivel de profundidad aportado por el sistema de compras y el nutrido elenco de modos disponibles, tenemos como resultado el que, quizá, sea mejor juego de carreras futuristas de esta generación, superando claramente a sagas como Xtreme-G o al intento de entrada en el género que supuso para Microsoft Quantum Redshift.
Tanto si eres seguidor de la saga como si solamente te interesan los juegos de velocidad este F-Zero GX es una de esas compras seguras, más aún si tenemos en cuenta que este género está algo cojo en GameCube.
Si por el contrario eres un aficionado casual de este tipo de juegos quizá se te haga algo difícil de controlar las naves, principalmente por la altísima velocidad a la que funciona el juego, y por la complejidad de algunas pistas; pero a poco que lo juegues un par de horas muy probablemente descubrirás la calidad que atesora y terminarás haciéndote con él, cuando menos deberías echarle un ojo.
Podemos afirmar a las claras que el primer desarrollo de Sega para una franquicia de Nintendo ha superado su prueba con un sobresaliente, ojalá se repita en los tiempos por venir.
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TÉCNICA
9 GRÁFICOS
9 SONIDO
8
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JUGABILIDAD
9 DIVERSIÓN
9
DURACIÓN
10 |
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Lo
mejor:
El impresionante nivel gráfico y la profundidad jugable del conjunto.
Lo
peor:
Demasiado difícil en ocasiones, melodías no demasiado inspiradas. |
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