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Aladdin
Autor: ORD, 3-10-2005

Aladdin es un claro ejemplo de que una bella factura técnica no siempre es capaz de difuminar las carencias de base que pueda tener un juego.

Plataforma: Master System
Tipo de juego: Plataformas
Desarrollador: Sims
Editor/Distribuidor: Sega
Nº de jugadores: 1
Versión: PAL
Año: 1994
Disponibilidad: Rom

Pese a que la vida de pícaro en Agrabah es dura, Aladdin va superando las vicisitudes que se le presentan en sus actividades diarias sin mayores contratiempos hasta que una bella desconocida se cruza en su camino. La joven, tras "tomar prestada" una manzana de un puesto de venta en el mercado, es perseguida por miembros de la guardia del visir y Aladdin decide auxiliarla en su huida. Desafortunadamente ambos son capturados y en ese instante la muchacha desvela su auténtica identidad para evitar el arresto de su valedor; ella resulta ser Jasmine, princesa de Agrabah. A pesar de esta revelación los guardias tienen órdenes explícitas del visir Jafar y Aladdin da con sus huesos en prisión. Jafar tiene otros planes para el osado compañero de la princesa...

Sin lugar a dudas Aladdin es uno de esos juegos que "entra por los ojos". Desde el punto de vista técnico es un juego casi perfecto, al que solamente se le puede achacar que nunca hay demasiados sprites en pantalla simultáneamente y algún que otro parpadeo aislado. Por lo demás los personajes gozan de un buen tamaño y sus animaciones son muy suaves; además, el protagonista poco tendría que envidiar a su "vecino" el príncipe de Persia en lo que a diversidad de movimientos concierne. Aladdin camina, corre, salta, se cuelga de los salientes, camina en cuclillas, se desliza por el suelo y demás con una soltura sorprendente. Por otro lado los escenarios brillan con luz propia, sobre todo en las fases de persecución donde el scroll parallax consigue excepcionales resultados, especialmente en la huida con Jasmine por los tejados de Agrabah. El motor gráfico y el acertado diseño de los personajes (teniendo en cuenta la resolución de Master System) también se dejan notar en las numerosísimas secuencias intermedias que van esbozando el argumento de la película, tan bellas atractivas a la vista como el resto del juego. Indiscutiblemente uno de los cartuchos más bonitos de todo el catálogo de 8 bits.

Las músicas no llegan a las cotas de calidad que suelen tener los juegos avalados por Disney, lo que no quiere decir que sean malas, simplemente no destacan. Los efectos sonoros son bastante "estándar", nada que no se haya oído en otros títulos, pero siempre se espera un poco más de una producción precedida de tanta expectación.

Una de las peculiaridades de Aladdin es que existen cuatro tipos de fases a lo largo del juego: de persecución, de habilidad, de vuelo y, por último, el enfrentamiento final con Jafar. Como se puede ver variedad a la cosa no le falta, el problema se encuentra en la carencia de atractivo de su propuesta jugable.

En los niveles de persecución el protagonista se desplaza de forma automática hacia el lado derecho de la pantalla, lo único que ha de hacer es sortear los obstáculos para evitar ser atrapado por el guardia de turno, siempre que se sea el perseguido y no el perseguidor, claro, o desaparecer por el margen izquierdo. De un palo similar son las fases de vuelo a lomos de la alfombra mágica, en las que se debe de evitar todo lo que pueda colisionar con el peculiar transporte. Seguramente es un planteamiento demasiado simple como para que prolifere tanto en el cartucho, está presente en cinco de las nueve capítulos del mismo.

Las secciones de habilidad son en buena medida una "adaptación libre" del estilo de juego de Prince of Persia, sortear trampas, evitar enemigos con un patrón de conducta simple, hallar llaves para abrir puertas... No es que sean nada del otro mundo pero, a pesar de ello, son lo más entretenido del juego.

Durante el enfrentamiento final con Jafar será en el único momento donde Aladdin empuñe una cimitarra, al contrario de lo que sucedía, por ejemplo, en la versión Mega Drive, donde se pasaba todo el rato blandiéndola de aquí para allá. El combate en sí no está demasiado conseguido y casi es posible acabar con el malvado visir sin usar para nada las neuronas, con atosigarlo constantemente, aún a costa de recibir algún que otro impacto, es posible derrotarlo.

Aladdin, parece un producto hecho con muchas prisas, sin complicarse la vida, picoteando de aquí y de allá pero sin la inspiración necesaria para satisfacer a cualquier usuario mínimamente exigente en lo que ha diseño de juego respecta; que se limitó a buscar el amparo de una licencia de extraordinario éxito y de un acabado visual excelente para conseguir entrar en las casas de los incautos usuarios jóvenes de la época e instalarse en sus estanterías a los dos días para no salir de ellas nunca más porque, por si fuera poco, es bastante corto.


TÉCNICA
9
GRÁFICOS
9
SONIDO
7
JUGABILIDAD
6
DIVERSIÓN
5
DURACIÓN
5
TOTAL
ACEPTABLE
Media de los lectores: 6.6
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Otros análisis:
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Sobre las puntuaciones
Lo mejor: Muy atractivo a la vista.
Lo peor: De divertido tiene poco.

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