BioHazard Code: Veronica Complete
Autor:
ORD,
18-7-2006
Ligerísima revisión del que en su momento fue considerado el episodio de la saga Resident Evil más redondo.
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Plataforma:
Dreamcast
Tipo
de juego: Survival Horror
Desarrollador:
Capcom Production Studio 4/Nextech
Editor/Distribuidor:
Capcom |
Nº
de jugadores: 1
Versión:
JAP
Año:
2001
Disponibilidad:
Importación |
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Racoon City, una ciudad del medio oeste norteamericano, fue totalmente arrasada por el brote del virus T, una catástrofe instigada por la corporación Umbrella, una multinacional tras la que se ocultan inquietantes intereses. Claire Redfield, que viajó a Raccoon buscando a Chris, su hermano desaparecido, consiguió escapar de la ciudad junto con el agente de policía Leon Kennedy. Tres meses después de estos acontecimientos Claire llega a Europa siguiendo la pista de su hermano pero allí es capturada por miembros de Umbrella y llevada a una prisión de la compañía en una remota isla. Chris acudirá a su rescate sin saber que la más joven de los Redfield ya ha puesto sus propios medios para huir.
El salto de generación supuso una considerable mejora en el aspecto visual de la saga Resident Evil e hizo de Code: Veronica el primer juego de la misma con escenarios poligonales en vez de los clásicos fondos prerrenderizados, lo que a su vez conllevó al fin el uso en ciertos momentos de cámaras móviles para seguir al protagonista. Como era de esperar también los zombis y demás engendros de Umbrella se beneficiaron del paso a los 128 bits, dejando atrás el aspecto desgarbado y cuadrado de Raccoon City para mostrarse más aterradores que nunca; aunque no cabe duda de que la evidencia de la evolución la personifica Claire Redfield, cuya encarnación en Dreamcast estaba, como era lógico por otro lado, a años luz de la que formara tándem con Leon Kennedy en Resident Evil 2. A pesar de todo esto se mantuvieron algunos "vicios" de entregas anteriores, como la falta de animación de los personajes al girar sobre su propio eje, las sombras circulares que estos proyectan o una texturas que no dan la talla en los planos cercanos, cosas que vistas a día de hoy parecen casi inexcusables, al menos en un tipo de juego como este, con entornos mayoritariamente cerrados y cuyo sistema de cámaras permite calcular con precisión casi milimétrica los recursos que se precisan en cada momento. ¿Realmente no se podía estirar un poco más el hardware para subsanar estos fallos? El resultado tecnológico del cambio de generación es satisfactorio pero no sobresaliente.
El continuismo es la nota predominante en el apartado sonoro. El doblaje sigue en la línea discreta de anteriores episodios y en ocasiones se acusa una cierta desincronización con el movimiento de los labios de los personajes. La música y los efectos sonoros contribuyen a mantener en tensión al jugador, justo lo que se supone que han de hacer, y en muchos casos sirven para anticipar la presencia de enemigos en las proximidades.
No solo el sonido sigue la estela de tiempos pasados, el control de los protagonistas también lo hace, siendo el que han lucido todos los juegos de la serie hasta la llegada de Resident Evil 4. El resultado es el habitual, un engorroso y anquilosado manejo de los personajes, que hace que estos se desplacen en función de sus propias coordenadas de izquierda, derecha, adelante o atrás en vez de emplear las de la pantalla (si se presiona derecha en el pad, el protagonista se moverá hacia su derecha, no hacia la derecha del escenario como sucede en la mayoría de los juegos) lo que convierte en un calvario los primeros momentos de juego, sobre todo si nunca se había probado otro título de la saga.
Los problemas anteriormente expuestos serían muy difíciles de superar para cualquier producción ordinaria, sin embargo los "survival horror" de Capcom han triunfado a pesar de ellos y el que centra este análisis no es ninguna excepción. La compañía japonesa refinó al máximo su sistema de juego basado en la resolución de puzzles y la acción para sacar partido de unos escenarios limitados en extensión que hace recorrer al jugador de forma reiterada, sin que por ello el tedio se apodere de la partida en ningún momento, gracias al gran diseño de la aventura que hace que el ritmo no decaiga a lo largo del juego.
Ahora la cuestión que a estas alturas rondará la cabeza de muchos, ¿qué ofrece BioHazard Code: Veronica Complete que no ofreciera el juego original aparecido en Europa? Pues muy poco, mucho menos de lo deseable. Las novedades tan solo abarcan cuatro nuevas secuencias de vídeo con Wesker, el traidor del primer Resident Evil, un cambio de peinado para Steve y el disponer desde el inicio del modo Batalla (en que hay que avanzar por varias secciones del escenario enlazadas sin más preocupación que liquidar a todo lo que se ponga por delante, en tercera o en primera persona) así como de la posibilidad de escoger el nivel de dificultad de la aventura principal. Nada imprescindible.
Está actualización, por llamarla de algún modo, no aporta nada a quienes hayan jugado al original y para los que no lo hayan hecho sin duda resultará más cómodo hacerlo a aquel, que tenía los textos en español. Pasando por alto esta premisa, es evidente que se trató del mejor Resident Evil desde cualquier punto de vista hasta la salida de los "remakes" de GameCube, y se convirtió por derecho propio en un referente entre el catálogo de terror de Dreamcast.
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TÉCNICA
8 GRÁFICOS
10 SONIDO
8
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JUGABILIDAD
7 DIVERSIÓN
9
DURACIÓN
8 |
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Lo
mejor:
El paso de la saga a las completas 3D permitió cierta evolución en algunos aspectos.
Lo
peor:
Apenas hay extras con respecto a Code: Veronica. El control. |
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